Desafíos de la gestión universitaria en la post pandemia

14/11/2020
UNC

Por María Victoria Fernández | Nodocente UNC | Militante PSol Córdoba

 

Mucho se ha escrito estos meses sobre los retos de todo tipo que esta pandemia le impuso a la Universidad pública y los métodos de enseñanza / aprendizaje que propuso la virtualidad al sistema educativo. Me interesa abordar en estas líneas los desafíos de un tercer sector a veces olvidado, fundamental para la gestión universitaria y sostén administrativo del detrás de escena: los Nodocentes.

Estos trabajadores conformamos un importante grupo de actores en la vida universitaria que hacemos posibles las actividades que cotidianamente se realizan en las distintas unidades académicas en distintos sectores: administrativo, técnico, servicios generales, mantenimiento y producción.

¿Qué fue de todas estas actividades en la pandemia?, ¿estaban listas las universidades y sus trabajadores para plantearse la virtualidad?

A través de los años se han implementado, en la mayoría de las universidades nacionales, sistemas informáticos y de administración de información (SIU), Guaraní (gestión académica), Kolla (seguimiento de graduados), Araucano (estadística de alumnos), Mapuche (recursos humanos), Pilagá (sistema económico, presupuestario, financiero y contable), Querandíes (programas y áreas), Diaguita (compras, contrataciones y patrimonio), entre otros, que facilitan el acceso a la información, el control de gestión, los trámites universitarios, etc. Este proceso se ha convertido en un desafío para el personal nodocente que, ante la existencia de las nuevas TIC, ha tenido que adaptarse a estos cambios a través de estrategias de alfabetización informacional y cursos de capacitación específicos.

Sin embargo, estas herramientas no engloban la totalidad de los procesos que abarcan las tareas universitarias, sobre todo las administrativas.

Toda crisis viene de la mano de una oportunidad y ésta no es la excepción. La pandemia permitió el replanteo de algunos métodos promoviendo la reflexión interna sobre la renovación del modelo de enseñanza y aprendizaje y exponiendo la necesidad de reformular formas en las que se lleva adelante la gestión administrativa de las universidades. Por poner un ejemplo, el Ministerio de Educación de la Nación, ente en constante contacto con las universidades, presenta un gran número de trámites con posibilidad de hacerlos a través de la TAD, una plataforma donde cualquier ciudadano puede realizar su trámite ante organismos públicos nacionales desde su casa, oficina o dispositivo móvil.

Las instituciones deben poder adaptarse a estas nuevas necesidades. Las universidades, en su misión de dar respuesta a problemas colectivos, a menudo recaen en deficiencias que es necesario reformular. Las automatizaciones en los procesos institucionales son necesarias. Las innovaciones tecnológicas ayudan y generan un aporte ofreciendo miles de posibilidades de reestructuración de las formas de gestión.

Sin embargo, nada de esto puede imaginarse sin la participación activa del personal nodocente en todas las etapas de desarrollo e implementación de cada nueva herramienta que tienda a optimizar la gestión universitaria.